Escritas por mi papa desde 1954...Un hombre con sentido común

martes, 5 de julio de 2011

desgraciadamente, los meritos plausibles alcanzados en vida y muchas veces ensalzados, desaparecen con la muerte, pues si bien luego se los quiere evidenciar en ocasiones circunstanciales, ya es de forma nomás
al nacer uno adquiere genes mas malos que buenos. Dejando de lado las cosas aberrantes, aun en secuencias inocentes: como en las peliculas, siempre anhelamos que el muchacho que roba un banco, deseamos que no sea atrapado y que pueda disfrutarlo sanamente con su novia
las ocasiones en que se deben festejar ampliamente y con prestancia, se han de circunscribir a intervalos que puedan dar lugar a que no decaiga el interés que se pueda despertar ante el grupo de amigos y ante uno mismo
la maldad y la no maldad, si se revisa la crónica de la humanidad, se debe considerar que la primera, es la mas prometedora
la impaciencia no solucionará lo que la perseverancia pero sisn prisa puede lograr
"ver para creer" pero no para las religiones
la simpatía que puede surgir de un grupo de individuos por ser de una misma ciudad o nación, nace solamente de los circunstancial que pueda motivar esa seuda solidaridad momentánea
ciertos convencionalismos y formalidades, pueriles a veces, se hace necesario eludirlos, no por superioridad, sino por no imitar, sin desearlo por supuesto, al mediocre
la curiosidad es posiblemente, lo que une a los individuos
asi como el individuo aun no pudo averiguar el por que de su existencia, asi tambien no debiera interesarle el por que de su efimeridad y agradecer porque asi sea